Reseña: Andes. 72 días en la montaña; y unas notas sobre Estación Podcast
#5: Si eres de los que después de ver 'La sociedad de la nieve' buscaste vídeos para saber más, entrevistas a los supervivientes y no parabas de comentarla con tus amigos, este pódcast te interesa
👋 Bienvenidos a la quinta entrega de Lo de los pódcast, una newsletter con propósito de publicación quincenal que quiere ser un espacio para la crítica y discusión de pódcast narrativos en español.
Hace un año estaba en Uruguay. Allí, como te conté en la presentación de esta newsletter, fui hace un año a hacer una estancia de investigación de mi tesis doctoral y a dictar un curso sobre pódcast. Cuando hablo con alumnos no solo me gusta ponerles ejemplos buenos y escucharlos con ellos, sino que también intento que sean lo más cercanos posibles a su realidad.
Así que, buscando qué ejemplos de pódcast narrativos ponerles, me encontré con el pódcast que voy a reseñar hoy. Es un pódcast que cuenta una historia sobre un accidente de un avión uruguayo en los Andes el 13 de octubre de 1972. Quizá te suena, porque esa historia se ha hecho especialmente famosa este año por una película. 😜
Luego te cuento alguna cosa sobre Estación Podcast, el festival de creación sonora que se celebró la semana pasada en Madrid. Pero, ahora, te dejo con la reseña.
Espero que la disfrutes.
El pódcast de la sociedad de la nieve
Sí, has leído bien: otra vez la sociedad de la nieve. Pero esta vez en pódcast.
Quizá la pregunta que te estás haciendo mientras lees esto es por qué escuchar este pódcast si ya te sabes la historia, y la respuesta podría ser la misma que cuando te preguntan por qué leer un libro si te has visto la película. ¡Porque son experiencias distintas!
Además, hay otras muchas razones. La primera, porque esta es una historia con la que han crecido todos los uruguayos, que todos se saben de pé a pá. Por tanto, los que hicieron el pódcast sabían que tenía que añadir algo distinto, algo nuevo, si querían que en el paisito se escuchase ese pódcast. Así que, si eres de los que te has escuchado todas las entrevistas a los supervivientes en internet, no te preocupes. Desde ese punto partían también los productores del pódcast.
Belén Fourment,la narradora y una de las principales guionistas del pódcast, me contó hace unas semanas que para realizar el pódcast los periodistas de El País Uruguay hicieron más de 20 entrevistas. De esas, nueve son a los supervivientes. El resto, a familiares de los supervivientes y de los fallecidos, a la familia de uno de los rescatistas y a un piloto de avión, para que explique cómo era la ruta que trazaron para cruzar los Andes. Se trataba, me decía Fourment, «de expandir la mirada»: «Esta historia ya fue contada, se sigue contando, y tiene tantas miradas y matices como personas involucra. Y eso es lo que queríamos mostrar».
Creo que ese es, de hecho, el principal interés de este pódcast. Y donde mejor se ve es en el último episodio. De las 45 personas que iban en el avión, solo 16 regresaron. Las otras 29 no volvieron. En las historias que se han contado sobre el accidente se ha tendido a contar la historia de los primeros. Es verdad que seguramente, como dice uno de los padres de los fallecidos en ese episodio del pódcast, «gracias a que eran 45, pudieron regresar 16». Pero esa parte de la historia, la de la ausencia, no se ha contado tanto. Al menos fuera de Uruguay.
Por eso, si le das al menos una oportunidad a ese último episodio, escucharás al hermano de Numa Turcatti decir que no ha terminado de hacer el duelo aunque ya hayan pasado 50 años desde el accidente. O a su hermana, que asegura que la ausencia es hecho al que «no te acostumbrás» y que todavía hoy, a veces, cuando escucha unos pasos que suben por una escalera, piensa que pueden ser los de su hermano. También conocerás cómo no todos los supervivientes salieron de la montaña el mismo día, cómo pasaron la última noche y cómo fue su vuelta a Uruguay.
Otro de los puntos fuertes del pódcast es el excelente diseño sonoro. Se nota ahí el sello de UyCast, que consigue meter al oyente dentro del valle y lograr que la experiencia de escucha sea inmersiva. No molesta nada. Todo es para favorecer la historia —la avalancha, los silencios, las corrientes del aire…— y eso se agradece muchísimo.
También es de destacar, aunque no se vea, que este pódcast fue la primera incursión del diario El País en los pódcast narrativos. Y casi de todo el Uruguay. Fue por propia iniciativa de los periodistas. Según me contó Fourment, se quería experimentar con el formato y, entre los periodistas, hicieron una propuesta de temas y salió este. Como querían sacarlo para el 50 aniversario del accidente, solo tuvieron 3 meses para la producción. Y, además, fuera del horario laboral. Por un lado, eso obligó y favoreció un trabajo en equipo de todo el periódico. Por otro, demuestra que se puede hacer buen periodismo en pódcast sin que las circunstancias de producción sean las mejores, pero que se podría hacer un pódcast aún mejor si se apostase de verdad por el formato con los recursos y el tiempo necesarios.
En este sentido, Fourment me confesó que, cuando lo ha vuelto a escuchar, nota que falta dirección en la narración. Y cuando me dijo esto pasó algo gracioso. Cuando yo volví a escuchar el pódcast —también le animé a una amiga no muy podcastera a escucharlo, para tener más feedback, y coincidió en mis impresiones—, me dio la sensación de que la narración era un poco pesada, diría que lenta, sin demasiada emoción. Y se lo dije a Fourment. Y ella, entonces, puso cara de póker. «¡Para mí era demasiado rápida!», dijo. Así que no sé.
Para mí, esa sensación de narración algo pesada nacía de una narración más leída que hablada, con muchos datos y nombres que no era capaz de almacenar. Es cierto que el público uruguayo al que se dirigían los autores del pódcast ya conocía la historia y, supongo, los periodistas querían ser muy precisos y rigurosos con la historia. Esto se nota más en el primer episodio, porque se quiere presentar a todos los personajes (45), y en el segundo, cuando se comparten muchos detalles sobre el avión. Y, aunque entiendo los motivos, pienso que esto puede ser un problema, porque el pódcast narrativo es un producto sonoro que, por regla general, se consume mientras se realiza otra actividad. Y ahí es fácil que el oyente se pierda.
Es cierto, como he empezado diciendo, que gracias a todo eso también podemos conocer muchas cosas que, si no, no conoceríamos. En esos detalles, de hecho, descansa gran parte del valor del pódcast. Por eso, quizá con un poco más de tiempo y recursos en la producción, el pódcast habría ganado mucho. Este año los periodistas de El País Uruguay han hecho otro pódcast narrativo de nueve episodios, Los demonios del padre Antelo —sobre una secta cristiana que nació en Uruguay en los 80—, y, aunque solo he escuchado el primer episodio, se nota que en esta ocasión sí han tenido nueve meses para trabajar el pódcast.
A pesar de estas pegas, Andes. 72 días en la montaña es un pódcast que creo que merece la pena escuchar. En cuanto el peso del relato empiezan a llevarlo los testimonios —desde el final del segundo episodio—, el pódcast coge otro ritmo. Y si, como yo, eres malo con los nombres, no te preocupes. Lo más improtante en este caso no es quién dijo qué, sino el testimonio de los que lo vivieron.
Si le das esa oportunidad, me encantará que me cuentes qué te ha parecido y si eres más de la opinión de Fourment o de la mía. Si prefieres, puedes empezar escuchando el último episodio y, si te gusta, volver al principio.
⏱️ Escuchar los nueve episodios del pódcast (contando con este trailer) te dará para casi tres horas y media de aventura sonora.
🧐 Mientras lo escuchaba pensaba en…
La sociedad de la nieve 🎬 (2023, 144’). La película de Bayona, que puede verse en Netflix, desencadenó hace unos meses la histeria por esta historia. Ganó el Goya y fue nominada a los Globos de Oro, a los Bafta y a los Oscar. Para mí fue la gran película del año. Si prefieres algo más documental, también puedes ver La hazaña de los Andes (2022, 77’), que publicó el diario El País Uruguay junto con el pódcast del que te he hablado en un especial multimedia por los 50 años del accidente.
90 gramos. Episodio 1: La Antártida 🎧 (2024, 33’). Si hablamos de hazañas humanas, la carrera de Scott y Amundsen por ser los primeros en llegar al Polo Sur tiene que tener un hueco. La gesta de Scott fue una travesía de 159 días para atravesar unos 2.500 kilómetros y en la que gastó cerca de un millón de calorías. Cualquier mala decisión a 25 grados bajo cero podía suponer la muerte. Aquí cuentan, científicamente y con un desarrollo sonoro muy bueno, cómo y por qué Amundsen fue capaz de conseguirlo y en qué falló Scott.
Coleccionistas: Lápices 🎧 (2023, 8’). Uruguay es un país chiquito, de solo tres millones y medio de habitantes, pero está lleno de historias. Cuando el año pasado estuve allí, Flor Sartori, una alumna de la Universidad de Montevideo, me habló de la historia de Emilio Arenas. Ella, que es muy fan de (De eso no se habla) y Las Raras, quiso contar su historia: la del hombre con el récord Guinness de persona con más lápices distintos del mundo. El resultado de este episodio es excelente.
⚽️ BONUS TRACK: si eres del Real Madrid y quieres escuchar algo como previa a la final de la Champions, escucha Cómo no te voy a querer (2022, 4 episodios, 112’ en total), el pódcast de la Cadena Ser con el que vas a revivir la 14ª.
👨💻 Algunas notas sobre Estación Podcast 2024
Antes de despedirme quiero contarte algunas cosas sobre el festival de creación sonora que se celebró en Madrid la semana pasada. Como te conté en el último envío, la programación era inmensa y había que hacer una gran selección para decidir a qué ir. Yo llegué el jueves a mediodía a tiempo para asistir a los entresijos de Los expulsados del paraíso (ABC) y Hechos reales (TrueStory), dos pódcast de los que hablaremos en otros envíos y que me parecen de lo mejorcito de este año en España.
Mi sensación al llegar al Círculo de Bellas Artes fue muy parecida a lo que contó
, editora jefa de Prisa Audio: estos encuentros son como reencuentros de amigos que celebran juntos sus avances. Enseguida, saludabas a uno, a otro, o veías cómo otros se saludaban. Sí, esa era una cara de la moneda. La otra eran las largas colas que se montaban para asistir a las grabaciones en directo de los pódcast conversacionales.Si te digo la verdad —para eso estamos aquí, ¿no?—, me sorprendió la cantidad de gente que iba a esas grabaciones. Sí, es verdad que todos sabemos que los pódcast conversacionales son, de momento, los que más alcance tienen. Y sí, también que se han convertido en un altavoz de realidades sociales más desfavorecidas en otras épocas. Por eso, porque se preveía mucha asistencia de público, los conversacionales encerraron a las presentaciones de los narrativos en una sala más pequeña.
Y, en medio de esto, la sorpresa: el jueves por la tarde la sala de los narrativos se llenó, todas las sillas estaban ocupadas, se cerró el acceso y hubo gente que se quedó fuera sin poder escuchar el Dentro de… Hechos reales. Ese cerrar las puertas fue mi “pero” al festival, y fue un “pero” que varios comentamos entre pasillos al día siguiente.
Aunque no soy de los partidarios de medir la calidad o el éxito de un proyecto por su audiencia, ni tampoco pasó esto de que se quedara gente fuera con otros pódcast narrativos, sí creo que hay que pensar algo para estas situaciones. Sobre todo porque el éxito de estos proyectos, que llevan un trabajo enorme de producción detrás, de muchos meses, deberían ser un motivo de orgullo para la industria.
Y sí, insisto, vende más lo otro, pero si queremos que se reconozca al pódcast como medio no podemos quedarnos en privilegiar solo a un determinado tipo de pódcast.
Que los pódcast narrativos tienen un potencial mayúsculo lo saben bien en la industria audiovisual y en la del libro. En una mesa redonda el viernes por la mañana en la Casa América, Mónica Adán, editora de Penguim Random House, contó que en su búsqueda de nuevos autores llevan unos años buscando dentro del podcasting.
Por su parte, Domingo Corral, director de ficción original de Movistar+, explicó que cada vez se fijan más en el pódcast para buscar ideas porque «vemos ahí muchísimo talento y, además, es infinitamente más barato que una serie de televisión». Para hacerse una idea, Corral afirmó que solo poner en marcha la producción de una de sus series cuesta al menos tres o cuatro millones de euros.
Esto lo saben también las productoras de pódcast y por eso algunas, sobre todo ahora que Spotify ha recortado este año su producción de pódcast originales, han comenzado a trabajar sus pódcast como una IP propia que luego pueda ser desarrollada en otros formatos. Este es el caso, por ejemplo, de TrueStory (la productora de Hechos reales). Pilar Sayáns, su CEO, lo contó en esa mesa redonda y también dijo que a ella le encantaría ver «cómo se adapta El país de los demonios a la televisión a través de una ficción».
Estas adaptaciones van a ser uno de los próximos puentes de financiación para el pódcast. Ya lo están siendo. Pero no ha de hacernos olvidar que, como dijo José Ángel Esteban (Vocento), «el audio tiene muchísimo sentido en sí mismo y no es solo un pretexto. […] Lo mejor es que cada medio haga lo que mejor sepa hacer».
📚 Si quieres saber más, te dejo la crónica de Estación Podcast que ha escrito Gorka Zumeta.
😃 Ahora sí. Llegamos al final de este quinto envío de Lo de los pódcast. Si te ha gustado, me ayudaría mucho que lo compartieses con tus amigos en tus redes sociales.
🫂 También puedes seguirme en X en mi perfil personal (@ManuChica) y seguir la conversación allí.
🙏 Si no te ha gustado, también te agradecería que me dijeras qué esperabas encontrarte y cómo crees que puedo mejorar.
Si no quieres perderte el siguiente envío, puedes suscribirte aquí. Ya sabes: es gratis.
👋 Hasta la próxima.
Manu